La nostalgia del pasado puede ser uno de los motivos que ha llevado a muchas personas a volver a utilizar las salas de chat que se convirtieron en la génesis de la mensajería instantánea en los años noventa. Cada vez son más las personas que acuden a estas salas a vivir la experiencia de hablar con personas desconocidas en un chat de internet en el cual se debaten todo tipo de temas y puedes conocer a personas de todo el mundo.
En su momento fueron muy conocidos y visitados por las personas de habla hispana los chats de Terra, Ole o ElChat. Este último nunca ha cesado su actividad, y continúa recibiendo una importante cantidad de visitantes cada día. Poco a poco el ICQ y más adelante el Messenger hicieron que las personas dejaran de chatear con desconocidos y se crearan sus grupos de amistades con los que intercambiar mensajes instantáneos, hasta que la mensajería instantánea llegó a la cima de su popularidad con la aplicación para smartphone Whatsapp. En esa época era habitual encender el ordenador y lo primero que tecleaban los jóvenes en el buscador era “Chat España Gratis”.
Sin embargo, muchas personas están volviendo a los antiguos chats, y lo hacen por varios motivos. Uno de ellos, como ya se dicho, es la nostalgia de toda una generación que conoció a algunos de sus amigos, e incluso a su pareja, en una de estas salas de chat. Pero existen más: el anonimato que permiten este tipo de salas es superior al que permite Whatsapp, además, no se necesita conocer a una persona ni tener su número de teléfono para poder usarlas; de hecho ni siquiera se necesita tener teléfono, se puede chatear desde cualquier ordenador o tablet. Para terminar, cabe decir que la mayoría de estas salas suelen aglutinar a gente por sus intereses o por zonas geográficas, por lo que es un buen lugar para conocer a personas que tengan algo en común con la persona que ingresa a la sala, y permite hablar con más libertad.
Chatpublico.com es uno de esos proyectos que despiertan la nostalgia y en el cual se puede encontrar múltiples salas de chat catalogadas geográficamente, como “Chat Sevilla” o “Chat Coruña”. Allí se encuentran no sólo regiones de España sino también chats de distintos países como podría ser “Chat México”.
Posiblemente las salas de chat nunca vuelvan a ser lo que fueron en su momento, pero sin duda siguen siendo un lugar de encuentro para muchos nostálgicos, y para quienes desean pasar el tiempo hablando con desconocidos y dándose una oportunidad de ser sorprendidos. En un momento en que las redes sociales encierran en círculos cada vez más pequeños de pensamientos y creencias, rodeados tan sólo de amigos que piensan igual; los exploradores de las antiguas salas de chat se han convertido en unos valientes que se atreven a ir más allá de su zona de confort.