Justo cuando Tassotti le trituraba la nariz a Luis Enrique en el Mundial de Estados Unidos y cuando Michael Jordan hacía lo propio con algún que otro bate de béisbol durante su primera retirada de la NBA, una nueva franquicia arrancaba motores para su primer día en las carreras. Desde ese lejano 1994 hasta hoy en día, la saga «Need for speed» ha dado más vueltas y rotondas que una peonza, tocando todos los palos del género velocípedo, desde las persecuciones nocturnas a los desafíos nocturnos, pasando por el ancho garaje del tuneo fino, una de sus especialidades y marcas de fábrica. Y ahora, la serie pisa a fondo el acelerador con «Shift 2 Unleashed», una de sus mejores piezas, y que vuelve a proponer una nueva vuelta de tuerca, en este caso centrando su poderío y sus caballos en la simulación y no tanto en el arcade con el tubo de escape desbocado.
Pero como una cosa no quita la otra, aparte de convertirnos en ases al volante en los circuitos, también podremos acometer desafíos y piques en plena gran ciudad y en brillante horario nocturno. Todo es válido con tal de que el cuentakilómetros sobrepase los 300 km/h, algo que adquiere una dimensión desconocida gracias a la nueva perspectiva de conducción con la cámara instalada en el casco del piloto. En cuanto a marcas, tendremos las más espectaculares a nuestra disposición, con prototipos y bólidos de ensueño que también podremos personalizar a nuestro antojo. Unos escenarios y gráficos por momentos apabullantes, una gran variedad de modos de juego, desde el estelar Campeonato GT1 a las generosas opciones multijugadoras Autolog, y muchas medallas y trofeos para desbloquear materiales inéditos hacen de este título un espectáculo asegurado. Ojo a las curvas peligrosas y a todo gas con él.