A falta aún de buenos lanzamientos (sin contar los DLC que siguen cayendo del guindo), habra que volver a echar un vistazo a la cartelera para toparnos con otro de esos raros, o no tanto, ejemplos de cine-videojuegos del que hablábamos hace unas semanas al hilo de la cachonda «Attack the block». Se trata de «Bunraku», otra de esas películas con alma de scroll horizontal «machacadedos» y con final boss esperando en el último nivel.
Desafortunadamente, la mezcolanza no cuaja con tanta gracia y salero como en su predecesora british, y el conjunto hace aguas por todos los lados, tal y como señala hoy en ABC nuestro ilustre compañero José Manuel Cuéllar en su crítica, atinada como siempre. Meter en un mismo puchero spaghetti western, títeres japoneses (de ahí viene el título del filme), narrativa consolera y comiquera y todo lo que vayamos pillando y rebañando por el camino para aturdiar al espectador a ver si suena la flauta nada dulce casi nunca funciona. El totum revolutum convertido en «tontum» revolutum, vamos. Que esto no es el cine masala de los 70 y 80, género o corriente que podría ser el padre putativo de estos experimentos con gaseosa revoltosilla. Eso sí, los carteles siguen la misma línea epatante, como se puede ver arriba.
De todas formas, nada de tirar la toalla. La semana que viene se presenta, al fin, uno de los primeros gallitos de 2012, «Resident Evil: Revelations», en un acto que cuenta con la participación de los cineastas Paco Plaza («REC») y Miguel Ángel Vivas («Secuestrados»). Y, sin movernos de la franquicia, acaba de lanzarse la primera imagen de «Resident Evil: Venganza», enésima entrega peliculera protagonizada por Milla Jovovich y dirigida por su señor esposo Paul W. S. Anderson. Se estrena el 14 de septiembre, así que aún hay tiempo de cruzar los dedos y esperar que cada agua vuelva a su cauce natural. O, si no, al menos que el coctel se agite con cariño.