Para desengrasar y separar fases (no sé exactamente cuáles, pero algunas habrá), recomendemos un adorable juego que obra el milagro de mantener encandilados y entretenidos a los críos durante un buen rato, sin necesidad de narcotizarse con los espasmos televisivos de Hora de aventura o Bob Esponja, entre otros. Hablamos de «Perros y gatos 3D», un título que evidentemente entronca con uno de los troncos fundacionales de la DS, «Nintendogs», pero aportando un tono más entrañable y juguetón. Así, tendremos un puñado de simpáticos animalillos de casi todas las razas imaginables, tanto de canes (golden, dálmata, pastor alemán, husky…) como de mininos (siamés, británico azul, atigrado…) a nuestra disposición para cuidarlos y mimarlos a conciencia y, una vez relucientes y lustrosos, lanzarlos a competir en una serie de pruebas muy variadas para conseguir premios y objetos extras, desde comida a complemento, incluyendo gafas tan estrambóticas que no se las pondría ni el chihuahua de Paris Hilton. Pero esto es un juego, ya se sabe.
Uno de sus atractivos principales es el 3D, que posibilita la contemplación y disfrute de las mascota desde todos los ángulos de cada escenario. Y, por otro lado, con la compatibilidad con el modo Realidad Aumentada hará posible colocarlos en la palma de la mano y jugar con ellos en los 16 minijuegos a nuestra disposición o, simplemente, dar un paseo e interactuar con otros animales. Unos gráficos bastante decentes, ingeniosos detalles y muchos valores educativos para los más pequeños redondean un juego que nos da la patita con alegría y moviendo el rabito.