De acuerdo, todo el mundo está con un ojo y medio puesto en el E3, y lo que queda del otro en la Eurocopa, pero no hay que olvidarse de las novedades como, por ejemplo, «Starhawk», otro fetén intento por parte de Sony de aportar complejo vitamínico a la PlayStation 3.
Y lo hace de la mejor forma posible para su hábitat: con un juego de acción/shooter sci-fi en tercera persona, con el gatillo fácil, amplitud de campo tipo western futurista para liquidar a los malos y unos modos multijugador de lo más amplios y surtidos. Eso y, sobre todo, una espléndida incorporación de estrategia en tiempo real y muy constructiva, ya que buena parte de la mecánica del juego consiste en ir levantando muros, torretas y demás barreras defensivas (y ofensivas, claro) en la mejor tradición «Tente». El invento se llama «build ‘n battle» y, sinceramente, es una de las arquitecturas jugonas más interesantes y notables con que nos hemos topado en bastante tiempo.
Porque la verdad que que este «Starhawk» es fiel heredero de aquel «Warhawk» que sobresálió en los primeros gateos de la PS3, sobre todo a base de darle caña y cancha al modo multijugador, algo que aquí se ha respetado, aunque también el single es toda una experiencia tanto por tierra como por aire (mar, aquí poquito) gracias al carisma del protagonista Emmett Graves, que tendrá que manejar con buena mano una inquietante energía azul de difícil manejo y que puede convertir en mutante al más incauto. Así, el argumento mezcla diversos componentes (las pelis del Oeste de Leone, las fábulas apocalípticas tipo «Mad Max» y series como «Fringe») para plantear una aventura con buen soporte argumental y una ambientación espléndida donde nada se ha dejado al detalle, desde los efectos visuales a la banda sonora.
Un control sencillo pero muy efectivo, gran variedad de armas y de posibilidades constructoras, buen planteamiento en plan «defender el fuerte mientras los enemigos salen de la nada», y una sabia influencia de títulos recientes como «Battlefield 3»o más clásicos como «Battalion Wars» le aportan calidad a un título más que notable y que nos proporciona horas y horas de diversión, acción y táctica. ¿Se puede pedir más?